La festividad de San José es tradicionalmente el momento elegido para celebrar también el Día del Seminario. Este año, en cambio, las circunstancias de la emergencia sanitaria han provocado que la Conferencia Episcopal Española haya retrasado la celebración de la Campaña del Seminario hasta el 3 de mayo. El día, por tanto, ha transcurrido muy tranquilo, puesto que el Seminario lleva días cerrado y su comunidad aislada en el interior, pero sí que ha podido tener lugar la celebración del Rito del Acolitado, del seminarista Arturo José Matías Gutiérrez, presidido por el Arzobispo, Mons. Jesús Sanz.
El Rector del Seminario, Sergio Martínez Mendaro, por su parte, ha aprovechado esta festividad para escribir una carta a todos los sacerdotes y cristianos asturianos, recordando que este día «suele ser un momento de encuentro entre los seminaristas, sus familias, sacerdotes y amigos que nos reunimos para celebrar la Eucaristía presidida por nuestro Arzobispo, y tener un momento de compartir fraterno en el que la mesa y la convivencia forman parte de nuestra rutina anual». «Este año –escribe el Rector– la situación que estamos viviendo nos confina a todos a donde tenemos que estar con las debidas precauciones que requiere este delicado momento, pero aunque el encuentro no se pueda desarrollar como habitualmente no queremos dejar pasar este día sin un cariñoso recuerdo desde el Seminario».
Por todo ello, desde el Seminario su Rector ha aprovechado para recordar que «tenemos presente en este día a todos los sacerdotes de la diócesis que confinados en vuestras parroquias vivís un momento extraordinario en su sentido más etimológico rezando y celebrando solos la Eucaristía por nuestro querido pueblo de Dios», así como «a las familias de nuestros seminaristas, a los párrocos de sus comunidades de origen y los de las que están destinados. Van pasando los días de esta clausura en los que, aunque estemos telefónicamente en contacto, todos echamos de menos esas visitas de los nuestros que expresan esa pertenencia a una familia que para todos es muy importante».
«Echamos de menos –afirma en su carta– a los profesores y empleados que estáis en vuestras casas y que hacéis de esta la vuestra con vuestra presencia y vuestra labor. A nuestros hermanos del Seminario misionero Redemptoris Mater con los que siempre pasábamos un buen día de convivencia y a los alumnos de los centros de estudios que os acercáis para aprender filosofía y teología, a los candidatos y aspirantes al diaconado permanente y a todos los que nos tenéis presentes de distintas maneras».
Finalmente, recuerda que «no queríamos dejar de pasar este día de san José sin enviaros nuestro más cálido saludo, que en este día de san José él os proteja e interceda por vosotros y que desde la comunidad del seminario recibáis todos vosotros un afectuoso saludo en el Señor».
