RETABLO DE LA IGLESIA DE SAN PEDRO DE VIGAÑA, BELMONTE
El retablo de San Pedro de la iglesia parroquial de Vigaña se ubica en el muro testero del templo belmontino. Es un retablo de estética barroca, datado en el último tercio del siglo XVIII, que consta de predela (cuerpo inferior), un único cuerpo con tres calles y el ático. La figura del apóstol san Pedro entronizado ocupa la hornacina central, entre dos columnas profusamente decoradas de orden corintio. Destacan en los extremos dos estípites (columnas troncocónicas invertidas) de orden gigante, también rematados con capiteles corintios.
El retablo presentaba importantes fallos estructurales en la base que afectaban a toda la estructura por lo que fue preciso realizar un delicado trabajo de restauración de las carpinterías. También estaba afectado de manera muy severa por ataques de xilófagos y de humedad por capilaridad y filtraciones de agua.
La estabilidad del soporte estaba muy comprometida, con riesgo de desplome y presentaba importantes pérdidas volumétricas y pictóricas. Fue preciso desmontar el retablo, previo siglado de todas y cada una de las piezas para facilitar su recomposición.
Se procedió al saneo general, tratamiento antixilófagos, consolidación y reintegraciones cromáticas y volumétricas.
Los trabajos de restauración y recuperación del retablo resultaron laboriosos y costosos y pudieron llevarse a cabo, en el año 2022, gracias al apoyo económico de un feligrés de la parroquia de San Pedro. Ello ha permitido recuperar el retablo mayor de la Iglesia de Vigaña y restaurar el propio templo.
