Este domingo, después de rezar el Ángelus, el Santo Padre ha recordado la beatificación de Ángel Cuartas Cristóbal y ocho compañeros mártires, que tuvo lugar este sábado en la Catedral de Oviedo. En sus palabras, afirmó textualmente: “Estos jóvenes aspirantes al sacerdocio amaron tanto al Señor que lo siguieron en el camino de la Cruz. Que su testimonio heroico ayude a los seminaristas, a los sacerdotes y a obispos a permanecer límpidos y generosos, para servir fielmente al Señor y al pueblo santo de Dios”.
Además, en su comentario semanal, en este caso del Primer Domingo de Cuaresma, el Papa Francisco recordó que el Señor es tentado tres veces por el diablo. Tres tentaciones que –afirmó– indican «los tres caminos que el mundo propone siempre prometiendo grandes éxitos: la avidez de la posesión, la gloria humana y la instrumentalización de Dios». Al enfrentarse Jesús a estas pruebas, explicó el Pontífice «nos señala tres remedios: la vida interior, la fe en Dios y la certeza de su amor». La Cuaresma es un «tiempo privilegiado» –explicó– para purificarnos y experimentar la «presencia consoladora de Dios en nuestras vidas».
(Fuente: Vatican News)
