“No se entendió la pregunta que el Papa planteó para el Sínodo”

Publicado el 30/09/2022
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“No se entendió la pregunta que el Papa planteó para el Sínodo”

Este lunes, 26 de septiembre, tenía lugar en el Seminario Metropolitano la inauguración del Curso Académico 2022-2023. Comenzaba con la celebración de la eucaristía, en la Capilla Mayor, presidida por el Arzobispo de Oviedo, Mons. Jesús Sanz Montes, y con la presencia también del Obispo de Santander, Mons. Manuel Sánchez Monge, ya que a partir de ahora, los dos seminaristas diocesanos de esta diócesis vecina cursarán sus estudios en nuestro Seminario Metropolitano. Por tanto, a los veintiséis jóvenes que permanecen este año en el edificio del Prado Picón se sumarán en el Instituto Superior de Teología dos estudiantes más del Monte Corbán de Santander, junto a otros dos de la asociación Lumen Dei.

Tras la celebración de la eucaristía, tuvo lugar en el Aula Magna un acto académico, donde el Decano de la Facultad de Derecho Canónico de la Universidad Pontificia de Salamanca, D. José San José Prisco, impartió la conferencia “Verdadera y Falsa sinodalidad”. Así habló para Esta Hora:

Comentaba en su intervención que uno de los problemas fundamentales en torno al Sínodo, en su fase diocesana, era que realmente no se había entendido la pregunta que se planteaba, ¿a qué se refería?

Creo que el hecho de que la gente no supiera claramente cuál era el objeto de reflexión en esta convocatoria del Sínodo hecha por el Papa ha sido una dificultad importante. En realidad la pregunta que hizo el Papa era pensar sobre si ya estamos de algún modo viviendo en la diócesis y en la parroquia esos gérmenes de sinodalidad que consisten en el diálogo, en la escucha, en tomar juntos las decisiones y si esto ya se estaba dando. 

En cambio, la gente derivó hacia temas que no eran objeto del Sínodo, un poco por influencia de lo que estamos viendo en la prensa de las demandas de algunos episcopados como el de Alemania o el de Bélgica. La gente entró en confusión y empezó a hablar y a opinar de temas que no son objeto del Sínodo sobre la sinodalidad.

Al hilo de esto también es interesante una reflexión, y es que no todas las opiniones para esto son válidas.

En realidad lo que trata la Iglesia es de buscar la verdad, porque el conocimiento que tenemos de ella siempre es mejorable, y ese es el esfuerzo que hay que hacer también en el camino sinodal: buscar la verdad. Muchas veces las opiniones no buscan la verdad, sino que buscan el acomodo a la circunstancia, ser políticamente correctas, o se dejan arrastrar por la opinión común, pero eso no quiere decir que sean verdaderas.

Explicaba también en la conferencia el lunes el problema del episcopado alemán que ha dado tanto que hablar, ¿podría hacernos un breve resumen?

El Sínodo alemán comenzó casi paralelamente con la convocatoria del Papa para este Sínodo que estamos viviendo sobre la sinodalidad, lo que pasa es que los obispos alemanes tomaron la iniciativa de elegir unos temas distintos a lo que es el del Sínodo, haciendo girar el Sínodo alemán en torno a estos aspectos que son tan populares, que están tanto en los medios y que evidentemente también son causa de bastantes conflictos: el asunto de las parejas homosexuales, la bendición de este tipo de uniones, el asunto de la mujer y la ordenación sacerdotal de las mujeres, la intervención de los laicos en el gobierno de la Iglesia, el matrimonio de los sacerdotes… En fin, una serie de temas que son los que socialmente parecen más interesantes pero que realmente no son los temas del Sínodo que ha convocado el Papa para la Iglesia universal, de hecho ellos han tenido en varias ocasiones que ser llamados la atención por parte del Vaticano, la última ha sido hace unos días, cuando el mismo Nuncio de la Santa Sede ante el episcopado alemán les ha dicho que están desviando el objeto del estudio y que no es ese el camino de la Iglesia sinodal a la que está convocando el Papa Francisco.

¿Cuál sería entonces, haciendo alusión al título de su conferencia, la verdadera y la falsa sinodalidad?

Es claro que la falsa sinodalidad está referida a lo que el mismo Nuncio, en este mensaje que les estaba comentando en nombre del Papa, les dice, y es que la Iglesia no es parlamentarismo, no es que votamos y las mayorías deciden y las minorías se quedan sin poder opinar más. La Iglesia busca la verdad y esa verdad se da por el consenso que es obra y acción del Espíritu Santo, por lo tanto, esto no es parlamentario sino otra cosa distinta. 

Ciertamente tenemos que hablar, que discutir, que escucharnos y en ese sentido podemos aprender del proceso democrático todas estas “virtudes”, vamos a llamarlas así, como son la virtud del diálogo, del entendimiento, todo esto lo tenemos que aprender si es que no lo estamos haciendo bien. Pero la Iglesia no es una democracia, no es un parlamento porque no busca la mayoría, busca la verdad y esa verdad a veces no está en el sentido común de la gente, sino que hay que buscarla en la Escritura, en la tradición, por eso la verdadera sinodalidad es caminar juntos en el diálogo, en el compartir experiencias, en el escrutar la Palabra de Dios, en el profundizar el Magisterio y encontrar la verdad y con respecto a esa verdad obrar en consecuencia. 

Es importante también recalcar la importancia de la tradición y la continuidad como origen del Sínodo. 

Efectivamente en la Iglesia no hay nada que rompa con lo anterior, como decía el Papa Benedicto XVI “hay que buscar una reforma en la continuidad”. La reforma de la Iglesia se da en continuidad con lo anterior, nunca en la ruptura, entonces no hay reforma sin continuidad y esta siempre tiene que tener en cuenta el pasado lanzándose al futuro con una nueva perspectiva. El Papa Francisco no ha inventado nada, estaba todo en la Teología, en la Teología de la comunión que nace del Concilio Vaticano II como última reflexión y que ha tomado este matiz nuevo de sinodalidad como modo de ser, de estar, de vivir, de compartir dentro de la Iglesia. Creo que no siendo una absoluta novedad, sí es una nueva forma de mirar la teología conciliar, la eclesiología del Concilio Vatica-no II.

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