Los ramos que esperarán a los niños

Publicado el 03/04/2020
Share on FacebookTweet about this on TwitterEmail this to someonePin on PinterestPrint this page
Los ramos que esperarán a los niños

Este Domingo de Ramos será, como todo lo que llevamos viviendo desde hace tres semanas, un domingo atípico. Y lo sentirán principalmente los niños, para quienes la tradición del ramo, el bollo y los padrinos ponía una nota de color a las puertas de la Semana Santa. Por eso, la parroquia de San Nicolás de Bari, en Avilés, junto con las de la Magdalena, Versalles y San Agustín, se han unido para que ningún niño se quede sin ramo, a pesar de tener que permanecer en casa. Así, hace varios días lanzaron una campaña informativa para que todas las familias que lo desearan se pusieran en contacto con estas parroquias, quienes les personalizaron una tarjeta, junto con un ramo, que serán bendecidos este domingo a puerta cerrada, y que podrán ser recogidos al finalizar este periodo de confinamiento.

«Junto con todo el sufrimiento y dolor de los adultos en esta crisis, los niños, quizá más ajenos a todo ello, se aburren y necesitan un poco de ilusión», explica Alfonso López, párroco de San Nicolás de Bari. «Como aquí en Avilés este Domingo de Ramos suele ser una fiesta grande, queríamos contagiar esperanza, y que cada niño supiera que tendrá un trocito de ramín para entregar a sus padrinos, aunque sea más adelante –afirma–. A pesar de que estamos encerrados, la vida continúa, hay que seguir adelante y tenemos que procurar mantener una llama de ilusión».

Y parece que no son los únicos que lo ven así, puesto que entre las cuatro parroquias participantes han recibido 1.800 peticiones de familias para tener una tarjeta con su ramo. Ramos que han donado generosamente tres floristerías de la zona.

«La celebración de la eucaristía del Domingo de Ramos –a las 12,30 h– será sin bendición, tal y como se ha decretado para estos días, y se organizará a las 20,30 h una bendición de todos los ramos preparados que se quedarán en cuarentena esperando a sus dueños –cuenta el párroco de San Nicolás–. Será una bendición sencilla, a puerta cerrada, pero ayudará a mantener la ilusión de los que se quedan en casa».

La parroquia de San Nicolás de Bari de Avilés se ha destacado siempre por su intensa actividad y numerosa participación. En estos días de confinamiento han sido numerosas las actividades que han llevado a cabo, aprovechando el tirón de las redes sociales, que se han visto acrecentadas enormemente: «en tan sólo diez días hemos sumado más de quinientos seguidores nuevos en Facebook», reconoce Alfonso. Por supuesto se celebra misa a diario, una iniciativa en la que al principio «pensábamos conectar con una treintena de personas, y al final han acabado sumando más de mil visualizaciones cada una», dice el párroco. «Veo claramente que hay mucha necesidad de sentir a Dios cerca, y de vivir la fe en comunidad, no sentirse solos, sino verse conectados unos con otros. Yo estoy muy sorprendido por esta reacción». Y piensa aprovecharla, porque «sería una oportunidad perdida».

A pesar de ser virtual, la celebración de la Semana Santa será también intensa en San Nicolás, y contará, además de los oficios, con meditaciones y reflexiones a cargo de d. Jesús Higueras, párroco de Santa María de Caná (Madrid).

«Queremos en estos días ningún sector de la parroquia quede abandonado –explica Alfonso López–. Por ello, todo lo que hemos programado tiene como finalidad ayudar a la gente a vivir la Semana Santa en profundidad, en su casa, y elevar el espíritu».

A lo largo de estos días, además, la parroquia se ha organizado para atender a personas mayores enfermas, a través del grupo de jóvenes que les hace la compra y les provee de lo que puedan ir necesitando. «Estas personas mayores cuentan con un seguimiento por parte de voluntarios que todas las tardes les llaman y les preguntan cómo se encuentran», explica el párroco, que además afirma que «todo está centralizado a través de Cáritas arciprestal, pero a la parroquia acuden muchas personas que necesitan atención urgente, también».  «Toda una parroquia unida –concluye– que responde en muy diversos frentes, como una familia que sale a buscar a los que necesitan de su ayuda». Por todo ello, reconoce, «sólo recibimos gratitud».

 

 

Para mejorar el servicio, utilizamos cookies propias y de terceros. Si sigues navegando, entendemos que aceptas su uso según nuestra política de cookies.

Más información sobre cookies