El 67% de la población mundial –5.200 millones de personas– vive en países donde se producen graves violaciones a la libertad religiosa, lo que supone que pueden ser discriminados, marginados o perseguidos por causa de su fe. Es una de las conclusiones a las que se llega en el Informe de Libertad Religiosa en el mundo 2021, que se presenta este viernes 25 de junio en Gijón, en el salón de actos de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús (Gijón), a las 20,15 h.
El acto contará con la asistencia del Arzobispo de Oviedo, Mons. Jesús Sanz, y el Director nacional de Ayuda a la Iglesia Necesitada, Javier Menéndez Ros, y forma parte de la visita a las diferentes diócesis españolas que la institución está realizando para presentar, con los obispos respectivos, las conclusiones del estudio.
Este documento, que se publica actualizado cada dos años, está elaborado por la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, en él han participado un total de treinta autores, expertos independientes y equipos de investigación en universidades y centros de estudios de distintos países, y es, además, el único estudio realizado por una institución católica que analiza el cumplimiento o respeto de este derecho humano en todos los países del mundo (196), abarcando todas las religiones. Es también el único disponible en seis idiomas, y presentado a nivel internacional en las 23 oficinas que tiene la fundación en todo el mundo.
Tal y como subraya esta institución “La religión es motivo de discriminación, marginación y persecución de millones de personas pertenecientes a todos los credos. Por ello, con este informe se quiere sensibilizar sobre la necesidades de su protección y defensa. En aquellos países donde la libertad religiosa está garantizada, se establecen las bases para una coexistencia verdaderamente humana, tal y como pide el Papa Francisco”.
En el documento se aporta un mapa en el que se clasifican los países en función de sus niveles de discriminación y persecución religiosa. Por primera vez, se incluyen seis análisis regionales en los que se han dividido los 196 países, que dan conclusiones relevantes sobre el cumplimiento o la vulneración de este derecho fundamental. Otra de las novedades es la categorización de países en el grupo “bajo observación”, donde se incluyen aquellos en los que el estado de la libertad religiosa empieza a ser amenazante. Una de las principales conclusiones que arroja este informe es la radicalización del continente africano, especialmente en el África subsahariana, donde se ha producido un fuerte incremento de la presencia de los grupos yihadistas, en alianza con grupos violentos locales. Burkina Faso y Mozambique son dos exponentes de lo sucedido, tal y como explica la institución. En el 42% de los países africanos se ataca ya la libertad religiosa.
