Alrededor de 230 personas, muchos de ellos profesores de Religión pero también catequistas, y agentes de pastoral de todo tipo, están estos días participando en la Semana Diocesana de Formación (SDF) 2022. Una cita anual que por fin, después de dos años complicados (en 2020 no se organizó, a causa de la pandemia, y en el 2021 decidió plantearse en formato multisede, para evitar aglomeraciones), vuelve de nuevo en su formato original, con sede en el Seminario Metropolitano de Oviedo. En este sentido, desde la Delegación episcopal de Enseñanza, organizadora de la SDF en colaboración con otras delegaciones diocesanas coordinadas por Vicaría General, reconocen que este año “volvemos a nuestra casa, la casa que significa para nosotros la eclesialidad de la Iglesia en Asturias”. Quien lo afirma es Diego Muñoz, miembro de esta Delegación, que recuerda la importancia de “vernos, estar juntos para sentirnos Iglesia, una comunidad que se reúne en torno a la fe”. En este sentido, manifiesta que “la formación no es más que una ayuda para la fe, para descubrir nuestra fidelidad al Señor. Y estar juntos nos anima a vivir esa fe”.
Este año se han ofertado siete cursos, que se imparten desde el pasado día 1 de septiembre, en horario de tarde, hasta el próximo miércoles, día 7. Las materias de los cursos son muy diversas, aunque en esta ocasión se observa una preferencia clara por el conocimiento de la Biblia, el acompañamiento a los más jóvenes y también el manejo del vídeo y los audiovisuales como herramienta para la difusión en colegios, parroquias y asociaciones de todo tipo.
No será esta la única actividad que vuelve a su formato original en este curso. Desde la Delegación episcopal de Enseñanza se trabaja ya en la próxima Semana de Cine Espiritual para los colegios, que este año volverá de nuevo a los cines y también la actividad de “Oviedo Transcendente”, una iniciativa relativamente nueva pero muy solicitada y aplaudida, para jóvenes de cuarto de la ESO y primero de Bachillerato, que fue suspendida a causa de la pandemia y regresa con fuerza. La Catedral, la Comunidad Judía, la Casa Sacerdotal, el Obispado, Cáritas, la Delegación de Pastoral Penitenciaria y otros puntos de Oviedo que los jóvenes pueden recorrer, descubriendo la dimensión trascendental que está muy viva y muy presente en la ciudad en la que viven.
