Como una necesidad. Así surgió el espacio Ora 30’, hace unos siete años, en torno a varios colaboradores de la Delegación episcopal de Catequesis. “Echábamos en falta un lugar donde orar”, explica una de sus iniciadoras, Ana Aramburu. “En el grupo de colaboradores de Catequesis –explica–, coincidíamos en la sensación de que en nuestras parroquias, una vez que terminábamos nuestro proceso de iniciación cristiana, nos habíamos visto lanzados a realizar diferentes tareas de pastoral, desde catequesis hasta Cáritas, y sin embargo, no teníamos un espacio en el que alimentar nuestra fe”, reconoce. Y así, de una manera sencilla, surgió Ora 30’. Como un espacio abierto a todo el mundo, donde cada lunes y durante media hora (de 20,30 a 21 h) en la iglesia del monasterio de San Pelayo, en Oviedo, tiene lugar una oración guiada y preparada previamente por un equipo de personas. El lugar elegido, la iglesia de las “Pelayas”, como se las conoce familiarmente en la ciudad, tampoco es casual. Situada en el centro, se trata de una comunidad de religiosas contemplativas y orantes “que gozan de una tradición de seriedad y rigor”, explica Ana Aramburu. Las puertas del Monasterio se abrieron de par en par a esta iniciativa de Ora 30’, mostrando su colaboración desde el primer momento.
“Al principio pensamos que desde la misma Delegación de Catequesis podía ofrecerse un espacio de oración, donde las personas vinculadas a la pastoral pudieran venir y simplemente estar, y disfrutar de un rato de oración personal, pero en comunidad”, destaca Ana. Hoy, años después, la iniciativa continúa, eso sí, abierta a todo el mundo y no sólo a catequistas. Sus asistentes son, de hecho, personas de edad y perfil muy variado, y con una asistencia también diversa, donde predominan aquellas que acuden con frecuencia, otras que lo hacen de manera alterna, y religiosas de la comunidad del monasterio.
Año tras año, siguiendo el curso escolar –de octubre a junio–, Ora 30’ vuelve a ponerse en marcha en su lugar de siempre. Con el tiempo, han abierto sus propias redes sociales para darse a conocer –están en Facebook, Twitter e Instagram–, y también reparten cartelería entre las parroquias. No solo con la idea de que la gente acuda a su oración de los lunes, sino para ofrecer esta iniciativa a aquellas parroquias que la quieran implantar. “Yo misma, que soy de Arriondas, planteé al párroco ponerlo en marcha allí. De aquello hace ya unos cuatro o cinco años, y aunque no se hace con frecuencia semanal, sino una vez al mes, hay un grupo fijo de personas que se reúnen y funcionan ya de manera autónoma –explica Ana–. Yo iba a apoyar al principio, pero ya conocen la dinámica y es muy sencillo de hacer”.
Junto con la de Arriondas, son más las parroquias que se han interesado en introducir esta modalidad de oración en comunidad. “El año pasado se interesaron parroquias de Mieres y de Gijón, pero los diferentes confinamientos perimetrales fueron posponiendo la actividad, hasta el punto de no poder ponerla en marcha. Esperemos que en los próximos meses sea posible”, explica.
Y entre los planes de Ora 30’ se encuentra la próxima colaboración con Pastoral Penitenciaria para exportar estos momentos de oración, tras comprobar que entre los internos hay “sed de Dios” e inquietudes espirituales. Y también otras citas como un taller de Danza Contemplativa, los días 19 y 20 de febrero, en el monasterio de San Pelayo de Oviedo, y un Encuentro de Música y Oración con el grupo Ain Karem, vinculado a las Carmelitas de la Caridad de Vedruna, el 14 de mayo.
